jueves, 14 de febrero de 2008

La Heredera -Prologo-



La vida para Issa Bennet comenzó como la de cualquier niño.
Su familia era poderosa y adinerada. Poseían una de las mas célebres empresas de New York, así que nunca le falto nada material.
Pero nunca tuvo eso que casi todo niño tiene y que no se puede comprar con el dinero. Amor. Amor de ambos sus padres.
Su madre era la empleada de la casa, convirtiéndola a ella en la bastarda de la familia.
El único motivo por el cual su padre, el distinguido Adam Bennet, la reconoció como su hija fue por lastima.
La madre de la joven murió en el parto. Y el señor Bennet, no queriendo desprestigiar a su familia hizo pasar a la recién nacida por su hija legitima.

Aunque para todos los conocidos, Issa Bennet era una distinguida joven de la prestigiosa familia, sus hermanos no dejaban pasar ni un solo minuto sin recordarle su humilde origen.
A pesar de todo, la señorita Bennet era una excelente alumna y se destacaba en todo lo que hacia.
Cuando era niña no podía entender el distanciamiento de su supuesta familia hacia ella, pero al pasar los años supo la verdad de su existencia.
Cuando niña era tierna y frágil, pero la falta de amor y las crueldades por la que tuvo que pasar, la convirtieron en una joven de 18 años, fría y calculadora.

Era muy lista, y sabia como sacarle el máximo provecho a las situaciones.
Nunca podía ser engañada, y siempre estaba un paso adelante.
Sus hermanos jamás la quisieron y siempre la vieron como una extraña.

El primero de sus hermanos era Jard Bennet. Presumido y arrogante.
Siempre se sintió superior por ser el mayor.
Decía que él seria el dueño de toda la empresa familiar, por que era su derecho. Pero era un fiestero, que no conocía la responsabilidad.
Logro salir del colegio casi de milagro. Y su trabajo era conquistar mujeres para cada noche.
Issa nunca lo quiso. Es más, siempre lo odio.
Él siempre se aprovecho de su talento para impresionar a su padre. Y más de alguna vez trató de aprovecharse de su belleza.

Su segunda hermana era Liliette Bennet. Dulce y tranquila. Pero que las apariencias no los engañen. Podía ser esas cosas y más, en el exterior. Pero en el interior era una interesada y narcisista.
Estaba segura de que era la mujer mas hermosa del planeta, y que todos los hombres estaban a sus pies.
Pero secretamente siempre envidio a Issa.
Liliette era muy parecida a su madre, una mujer no muy agraciada.

Adam Bennet solo contrajo matrimonio con ella por una cuestión económica. Por más dinero y más poder. La engaño desde el primer día que la conoció, y seguramente la engañaría hasta el final de sus días.
Así que Lili, como la llamaba su familia, no era tan bella como pensaba, y los hombres solo iban a ella por el dinero que tenia.
Volviendo a lo anterior, Liliette siempre envidio a Issa por su belleza.
La madre de Issa era una hermosa joven de cabellos castaños muy claros y ojos color miel. Y como es de suponer, su hija heredo las mismas características.

Y por ultimo, pero no menos importante, estaba su tercer hermano, Seraphin Bennet. Un completo idiota. Issa siempre tuvo la leve sospecha de que Seraphin tenía algún tipo de retraso porque era realmente extraño.
Por supuesto que en la familia lo negaban cada vez que ella propusiera el tema.
El no era tan cruel como los otros con ella, pero cada vez que podía se reía de su desgracia, causada por sus otros dos hermanos.

Ah, la vida. Issa no podía quejarse. A pesar de todos, siempre tuvo lo que quiso. Obviamente tenia que ingeniárselas para adquirirlo.
Pero como ella misma decía “Siempre que quiero algo, lo consigo”